jueves, 26 de septiembre de 2019

El Basilisco


Leyenda Chilena de Terror del BasiliscoCuentan las leyendas de Chile que el Basilisco es una criatura mágica que surgió de la combinación de un reptil y una gallina.

Elaborando una descripción un tanto más amplia, podríamos decir que se trata de una bestia que ostenta una cabeza de gallo, el cuello escamoso y largo idéntico al de una serpiente y las patas de la forma y tamaño de las de una lagartija.
Los lugareños aseveran que por lo menos una vez al año, los granjeros encuentran una docena de huevos extraños en sus graneros.
En el momento en el que el Basilisco nace es casi igual a un renacuajo. Por ello, las personas que lo llegan a ver, no se sienten alarmadas. Sin embargo, se dice que la velocidad en la que esta criatura llega a la adultez, es sorprendentemente rápida.
Por su parte, algunos individuos están convencidos de que esta bestia tiene la capacidad de matar a cualquier persona que vea de frente. La víctima se queda petrificada durante aproximadamente cuatro horas.
Pasado ese lapso, le sobrevienen un sin número de dolores y calambres, que paulatinamente hacen que se le detenga el corazón. Como siempre, hay varios puntos de vista cuando de leyendas de terror se trata y es que existen personas que aseveran todo lo contrario. Es decir, que, si el individuo corre lo suficientemente rápido luego de que ha visto al Basilisco, puede escapar de su ataque sano y salvo.
Finalmente, otra variante de esta leyenda, que se asemeja más a los mitos que a las historias de terror, dice que esta criatura acostumbra entrar de noche a las casas de campo en busca de alimento.
No obstante, en el caso de detectar cualquier tipo de movimiento por parte de alguno de los miembros de la casa, el basilisco se oculta en las sombras y sale de la casa sin robar nada.

El paso del diablo


Resultado de imagen para diablo caminandoViajaremos hoy hasta Chiu Chiu, un pueblo ubicado en la Región de Antofagasta (Chile), lugar que en la época prehispánica fue parte del camino del inca. Después tras la conquista y evangelización de los españoles se convirtió en la casa de la Iglesia de San Francisco, la más antigua que se conserva en Chile, construida en 1611 y hoy declarada Monumento Nacional.

De su historia y características se puede decir mucho, pero en esta ocasión, nos centraremos en el rio Salado, un cuerpo de agua que nace de la confluencia de más de 30 vertientes termales en una hoyada a los pies del volcán El Tatio para ir a desembocar en el Loa, el río más largo de Chile.
En su paso por el desierto, recoge cientos de mitos y leyendas, en las cuales se habla de la desaparición de personas, muertes en circunstancias extrañas, y demás sucesos misteriosos que solo encuentran explicación en lo sobrenatural, tal es el caso de su cruce por Chiu Chiu, donde se encuentra el llamado paso o puente del Diablo.
Un lugar temido por la gente local, los pobladores se niegan transitar en sus cercanías después de las doce de las noche, porque del río sale el diablo con un cuchillo en la boca bailando e invitando a irse con él a todos los que encuentra a su paso.
A primera vista el lugar no produce espanto, en realidad su belleza natural le hace muy atractivo para los turistas o gente que gusta del senderismo, a últimas fechas se ha convertido en un lugar obligado para visita, posiblemente a Don Diablo le convenga ampliar un poco su horario de trabajo y empezar su danza macabra más temprano para aprovechar uno que otro turista despistado que ande por los alrededores cerca de las hora prohibida.

El Cuero


Leyenda Chilena de Terror del CueroEl Cuero es una criatura que vive en casi cualquier lugar en donde hay agua (no importa si esta es dulce o salada). Sin embargo, su hábitat preferido es en pequeños riachuelos u obscuras lagunas.

Su forma es justamente la de un «cuero de vacuno», por eso los indígenas le dieron ese nombre. En uno de los extremos de su cuerpo, posee unas fuertes, afiladas y largas garras.
Realmente son pocas las personas que han podido dar una descripción certera de su cabeza, pues se dice que ésta se encuentra cubierta por una suerte de tentáculos que desembocan en dos puntos de color rojo, los cuales se cree que son nada más y nada menos que los ojos de dicha bestia.
Por otro lado, un elemento que es constante en cualquier versión de esta historia es que en el centro de su cuerpo tiene una boca, misma que es capaz de succionar la sangre de sus víctimas, a través de la piel.
Además, tiene la capacidad de nadar sobre el agua, por lo que prácticamente ningún animal o persona está a salvo de sus ataques.
Uno de los poderes más conocidos del Cuero es el poder dominar el agua a su antojo. Él puede hacer subir o bajar la crecida del río, con tan sólo desearlo. También, tiene la capacidad de hipnotizar a sus víctimas, para que éstas permanezcan inmóviles durante su ataque.
Ahora mismo se me viene a la mente el relato que habla sobre una joven mujer que se encontraba lavando ropa a la orilla de un apacible río. La muchacha estaba tan distraída realizando sus actividades que no se percató de que el Cuero se iba acercando poco a poco a ella.
La bestia esperó el preciso instante en el que la joven metió una de sus manos al agua, para jalarla y succionarle toda la sangre en cuestión de segundos.
Al día siguiente, el cuerpo sin vida de la chica fue encontrada por los moradores de aquella región chilena.
Continuando con los aspectos mágicos de estas leyendas, no podemos dejar de mencionar el hecho de que la única manera de estar seguros de que el Cuero jamás te atacará es acercarte a un Machi.
Estos individuos utilizan un conjuro especial para atraer a la criatura lejos del agua. Una vez que la bestia se encuentra en tierra firme, el hechicero le tira unas ramas de «calafate«, un arbusto de la región andina que se caracteriza por tener unas ramas extremadamente duras.
El engaño consiste en hacerle creer al cuero que ha atrapado a una gran presa. Más al momento en el que éste se dispone a atacarla, las ramas llenas de espinas, se le entierran por dentro, causándole una muerte lenta y dolorosa. Así termina esta leyenda que se originó en el sur de Chile.

la Calchona


Leyenda Chilena de Terror de la CalchonaLos chilenos dicen que la Calchona era una hechicera que vivía con su marido y dos hijos. No obstante, éstos no sabían que en realidad la mujer era una bruja.

En el sótano de su casa, la mujer tenía varios frascos en los que almacenaba ungüentos (o pomadas como también se les conoce en ciertas partes de Latinoamérica), mismos que al ser puestos en un ser humano, lo transformaban en cualquier clase de animal que ella quisiera.
También se comenta que, por las noches, lanzaba un hechizo sobre su hogar, para evitar que tanto su esposo como sus hijos se despertaran durante la noche y así ella pudiera salir a lanzar conjuros a diestra y siniestra, sin el peligro de ser descubierta.
Muchas veces ella misma se aplicaba una crema, que le brindaba la posibilidad de convertirse en una oveja negra. Este disfraz lo usaba para pasear por el campo sin ser molestada.
No obstante, una noche que estaba a punto de abandonar su domicilio, se le olvidó lanzar el conjuro que dormía a sus hijos, por lo que éstos la vieron transformarse.
Los pequeños cogieron el frasco que había dejado su madre sobre la mesa y se lo untaron rápidamente en el rostro. Pasados unos segundos, su cuerpo se transformó en el de unos pequeños zorros.
Al principio los niños estuvieron muy felices, pues pensaron que sería divertido salir a pasear «disfrazados» por el bosque. A pesar de ello, después de unos minutos comenzaron a llorar amargamente, puesto que se habían dado cuenta de que no tenían un modo de regresar a ser humanos.
El llanto de los infantes, provocó que su padre se despertara. El hombre se sobresaltó al notar que en su casa sólo había un par de zorritos, mientras que su esposa e hijos habían desaparecido sin dejar rastro.
Sin embargo, al ver tirado uno de los frascos. A los zorros, recordó las clásicas leyendas chilenas que afirmaban que las brujas usaban pomadas para convertir a los malos en animales.
Buscó por toda la casa, hasta que encontró oculto en el sótano el lugar en donde estaban los ungüentos. Revisó las etiquetas y cuando encontró la que decía «antídoto» se lo aplicó a los niños, quienes rápidamente recobraron su forma humana.
Luego de eso, el hombre tomó todos los demás tarros y vació el contenido de estos en el río. Seguidamente, tomó a sus hijos y abandonó la casa lo más pronto posible.
Posteriormente la bruja regresó a su hogar y vio cómo su marido y sus pequeños se habían ido. Velozmente fue hasta el sótano buscando los ungüentos, pero desgraciadamente sólo encontró en ellos restos de las pomadas.
Se untó los sobrantes de las cremas en sus manos y en su cabeza, logrando que éstas recuperarán la forma humana, pero dejando el resto de su cuerpo igual al de una oveja.
Por esa razón, algunas noches los campesinos afirman que se puede escuchar balar a una oveja, quien busca a sus hijos desesperadamente. Adicionalmente, existe otra versión en la que se dice que la gente a veces le deja afuera de sus casas un plato de comida a la Calchona, pues se trata de una criatura mitológica completamente inofensiva, puesto que los años que ha pasado buscando a su familia, le han servido para arrepentirse de todos los males que provocó.

EL Colocolo


 Leyenda Chilena para Niños del ColocoloCuenta la leyenda que el Colocolo es una criatura mítica que le gusta chuparle la saliva a la gente que acostumbra dormir con la boca abierta. El nacimiento de este ser es un tanto extraño, pues los campesinos aseveran que se origina de los huevos abandonados que las gallinas de campo extravían.

Luego estos son recogidos por culebras quienes se lo llevan a su morada en donde los empollan. Después cuando la criatura nace, la víbora lo adiestra hasta que éste aprende a chupar la saliva de las personas.
Se dice que un día un hombre y su familia se fueron a vivir a una casa en el campo. No obstante, en cuanto llegaron, una de las vecinas les advirtió que lo mejor que pueden hacer era irse de ahí, ya que en ese domicilio los antiguos dueños habían muerto a causa del Colocolo.
– Eso es sólo una leyenda chilena mujer, le agradezco el aviso, pero tenga por seguro que, si la criatura aparece, yo la mataré de un pisotón. Replicó el padre de familia.
En la noche todos se fueron a acostar a sus respectivas habitaciones. De pronto, un fuerte grito hizo que su mujer se despertara. Giró la cabeza y vio cómo su marido tenía una terrible expresión de pavor en el rostro.
Ella saltó de la cama y encendió lo más pronto que pudo una vela. Rápidamente se dio cuenta de que su esposo tenía la boca completamente seca y que además no era capaz de respirar.
A la mañana siguiente, la mujer y los niños abandonaron la casa. Nunca se dijo que el misterioso fallecimiento de aquel sujeto fue provocado por el Colocolo, pese a eso, aquella casa jamás volvió a alquilarse.
De hecho, pasadas ya varias décadas, una madrugada, la construcción se vio envuelta en llamas sin que aparentemente nadie hubiera iniciado el fuego.
Maneras de acabar con el colocolo hay muchas, sólo que se trata de una criatura sumamente escurridiza, por lo que es difícil matarlo. La más simple, es tirándole varias pedradas.

Corta de la Lola


Leyenda Chilena Corta de la Lola Tal vez esta sea una de las leyendas chilenas más afamadas no sólo de ese país, sino de gran parte de Sudamérica. Este relato es ampliamente conocido sobre todo por la gente que se dedica a la minería.
El mito hace referencia al espíritu de una mujer joven que aparece por las noches, arrastrando el féretro de su esposo.
Dolores (obviamente sus familiares y amistades allegadas siempre la llamaron Lola) era una muchacha bastante guapa, a quien todos los muchachos del pueblo la asediaban, pues querían que ella se convirtiera en su novia.
Por otro lado, su padre quien siempre quiso que su hija se casara con un hombre de buena familia, la protegía demasiado, pues no deseaba que su retoño se relacionara con alguien que no perteneciera a la clase alta.
Sin embargo, un día la chica se escapó de su casa y conoció a un minero muy pobre. La pareja se enamoró al instante y Lola al saber que su padre no aprobaría esa unión, decidió huir con su amado en una fría noche.
Con el tiempo el marido de Dolores se convirtió en un hombre rico y poderoso, gracias a que llegó a trabajar en varias minas de las que se extraían metales preciosos tales como: oro y plata.
Pese a lo que se pudiera pensar, la pareja no era feliz, ya que el minero le era infiel a su mujer. Según cuentan los que saben esta crónica, un día Lola decidió esperar a su esposo en casa.
En cuanto él llegó, la mujer no pronunció ni una sola palabra y lo apuñaló directamente en el corazón.
Luego de eso Lola se fue corriendo con dirección al cerro gritando incoherencias. Después regresó al pueblo y les contó a los lugareños que a su marido lo habían asesinado unos ladrones.
En la mente de Lola la mentira poco a poco se fue convirtiendo en una verdad absoluta. A tal punto que un día tomó el cajón en donde reposaban los restos de su esposo y salió a la calle arrastrándolo, en busca de los asesinos de su marido.
Me contaron que, en la región norte de Chile, se puede escuchar el sonido que produce el féretro al deslizarse sobre la tierra, sobre todo en las noches de luna llena.

El Camahueto

El Camahueto es una criatura mitológica de leyenda que según la descripción de los lugareños se parecía a un ternero. Su estampa es muy hermosa, gracias a que su pelaje es de un color verde brillante.
Quizás, la mayor de sus particularidades es que tiene un cuerno situado justo al medio de la frente, de la misma manera que el unicornio. Las leyendas que se cuentan en Chiloé aseguran que invariablemente los Camahuetos nacen en las capas subterráneas de la tierra, a partir de los restos de uno de esos cuernos.
También se cuenta que las curanderas usaban el cuerno de estos animales como ingrediente principal en sus brebajes. Ya fuera para curar cosas tan simples como leves infecciones en la piel o enfermedades degenerativas como por ejemplo el reumatismo.
Sin embargo, había que tener un especial cuidado al momento de utilizar tan poderoso ingrediente, puesto que, si se usaba demasiado el paciente corría el riesgo de sufrir dolores crónicos de cabeza y en casos extremos, episodios de locura permanentes.
En la actualidad, en algunos mercados de Chiloé se ofrece a los turistas la «raspadura de Camahueto» para aliviar cualquier tipo de malestar. A pesar de esto, lo que verdaderamente están ofertando es ralladura de conchas de mar.

La creación del mundo


Se cuenta en Rapa Nui, la Isla de Pascua, que cuando en la tierra no había nada todo estaba por hacerse. Entonces, ocurrió una disputa entre los espíritus. Un espíritu poderoso que vivía en el aire se impuso ante los más débiles que se rebelaron. El poderoso los convirtió en montañas y volcanes. A los arrepentidos los convirtió en estrellas.  Para habitar la tierra, el poderoso transformó en hombre a un espíritu que era hijo suyo; lo lanzó a la tierra y, al caer, quedó aturdido. La madre del joven sintió tristeza y quiso observarlo; entonces, para mirarlo, abrió en el cielo una pequeña ventana. Por ella, a veces, asoma su rostro pálido. El poderoso tomó una estrella y la convirtió en mujer para que acompañara a su hijo.
Para llegar al joven la mujer tuvo que caminar con sus pies descalzos, pero no se lastimó porque el poderoso ordenó que crecieran hierbas y flores a su paso. Ella jugaba con las flores y al tocarlas se convertían en aves y mariposas. Y la hierba que su pie había tocado se convirtió en una selva gigantesca. La pareja se reunió y encontraron que el mundo era bello. En el día, el poderoso los miraba por una ventanita redonda, y fue el sol. En la noche, era la madre quien se asomaba por la ventana, y fue la luna.

La anciana dueña de la montaña

En las boscosas montañas de la Araucanía, se perdió un hombre que andaba buscando a sus animales. No los encontró. Se hizo la noche sin que hallara el camino de regreso a su casa, de modo que decidió buscar un lugar en el monte para dormir. Cuando se acomodaba para descansar, de pronto vio un fulgor en medio del bosque. Era una fogata y alrededor del fuego bailaba una anciana. Se dirigió hacia ella. Se trataba de Kvpvka, la dueña de la montaña, que tenía una casa hecha con materiales recogidos en los bosques del monte. Poseía de todo, papas, arvejas, maíz, etc.
El hombre saludó con mucho respeto a la anciana, luego se hicieron amigos y se casaron. Al saber que el hombre era pobre, viudo y que tenía cuatro hijos, la anciana le dijo: “si tienes hijos, tráelos, aquí hay de todo”. Entonces el hombre llevó a sus hijos, comieron y alojaron en la casa de la Kvpvka. Cierta noche, uno de los niños se rió de los pies de la anciana: “miren, la viejita tiene sólo dos dedos”. La anciana montó en cólera, pateó su casa y así desapareció todo, el fuego, la riqueza y la Kvpvka. El hombre desesperado devolvió a sus hijos a la antigua casa, les aconsejó contra la burla y regresó a la montaña para seguir viviendo con la Kvpvka.

La Quintrala

Tenía el pelo rojo como el quitral, por ello le llamaban la Quintrala. Su nombre, doña Catalina de los Ríos y Lisperguer. Hermosa y caprichosa, figura entre los más temibles criminales del siglo XVII. En su hacienda de La Ligua y los alrededores dejó una leyenda de horror, atribuyéndosele pactos con el diablo. Desenfrenada,  fue indomable para su marido –que vivió poco tiempo- quien se convirtió en cómplice de su perversidad. En la zona se cuentan los maltratos que propinaba a los indios de la hacienda, quienes debían fugarse hacia los montes. La Quintrala presidía los castigos sin conmoverse ante el dolor ajeno. Acusada por sus crímenes fue apresada y juzgada por el comisionado de la Audiencia, quien la encontró culpable de parricidio y del asesinato colectivo de su servidumbre. Se le condujo a Santiago donde su astucia y dinero influyeron para dilatar el proceso.
Entre los pactos diabólicos que se le atribuyen está el que hizo para conseguir el amor del fraile que la casara. El fraile se resistió al acoso y se autoflagelaba, hasta que huyó hacia Perú para evitar a la seductora bruja. Solo volvió cuando supo del arresto y de sus enfermedades. Nunca confesó sus pecados mortales.

La piedra del León

En tiempos en que los indígenas habitaban la zona de San Felipe, los pumas abundaban en los alrededores. Y por ahí se encuentra la piedra del león, más precisamente en un cerro llamado Yevide. Desde que existe memoria se sabe que estos felinos han sido perseguidos y que están en riesgo de exterminio. Cuenta la leyenda que en Yevide vivía una hermosa leona con sus dos cachorros. Un día la hembra tuvo que dejar a sus hijos para salir a buscar comida, y dejó a los cachorros durmiendo junto a una enorme piedra. Cuando la leona regresó de la cacería los pequeños no estaban.
En su ausencia, unos arrieros se los habían llevado. La madre, desesperada, los buscó incesantemente sin resultados. Al llegar la noche se echó desconsolada junto a la piedra e hizo escuchar sus gruñidos de lamento. Se dice que desde todas partes se escuchaban los rugidos del animal, que no eran otra cosa que el llanto de una fiera herida. A partir del amanecer siguiente nunca más se volvió a ver a un solo puma. Todos se fueron del cerro Yevide. Y en las noches de invierno, la gente suele escuchar el gemido de la leona. Es el alma de ella, dicen, que aún reclama a sus hijos que dejó en la piedra.

La Añañuca

Añañuca era una joven que vivía en Monte Patria, un pueblito cercano al río Limarí. Entonces se llamaba Monte Rey porque aún estaba bajo dominio español. La hermosa Añañuca atraía la admiración de los jóvenes del pueblo. Ninguno había podido conquistarla. Un día llegó un buenmozo y enigmático minero que buscaba una veta de oro muy codiciada. Al ver a Añañuca se enamoró de ella y se quedó a vivir en Monte Rey. Y fue correspondido. Una noche el minero tuvo un sueño inquietante. Se le apareció un duende de la montaña que le reveló el lugar preciso donde estaba la veta de la mina que lo tenía obsesionado. Sin vacilar partió en su búsqueda, dejando a Añañuca con la promesa de que volvería.
Añañuca esperó día tras día, pero su enamorado no regresó. El espejismo se lo había tragado. La tristeza se instaló en Añañuca y fue muriendo de amor, desconsolada. La gente de Monte Rey la lloró y enterró un día de lluvia. Al otro día, el sol calentó el valle y se llenó de hermosas flores rojas, que en honor de la joven fueron llamadas Añañuca. La flor crece hasta hoy entre Copiapó y el valle de Quilimarí y, después que el cielo llora, la pampa se convierte en el maravilloso desierto florido.

miércoles, 4 de septiembre de 2019

La laguna del Inca

Resultado de imagen para laguna del inca leyenda Cuenta la leyenda que existió un lago en el incanato que representó las penas de amor del inca Illi Yupanqui y que, según las tradiciones, sería la laguna actualmente conocida como la Laguna del inca en la Cordillera de Los Andes.
Según la leyenda, en esta laguna Illi Yupanqui lloró todas sus penas cuando la princesa inca Kora-lle murió al sufrir un accidente al estar cumpliendo una tradición para su matrimonio. Allí fue dejado el cuerpo de la princesa, y se dice que en ese momento la laguna se volvió color esmeralda, teñido por el color de los ojos que el hijo del Sol no pudo más despertar. También se dice que en ciertas noches de invierno todavía se puede oír los lamentos del inca.

La Pincoya

Resultado de imagen para la pincoya  La Pincoya es una criatura imaginaria marina perteneciente a la mitología de Chiloé, en el sur de Chile.
Tiene el aspecto de una mujer joven y muy hermosa, con una larga cabellera rubia. A diferencia de la sirena chilota (que posee una cola de pez), ella tiene una apariencia completamente humana. La leyenda dice que aparece desde las profundidades del mar, semi vestida con un traje de sargazo a danzar en las playas y que, por medio de la orientación de su danza, señaliza si la pesca será abundante o escasa en la temporada que se avecina.

La llorona

                 Resultado de imagen para la llorona chilena         La Llorona es un espectro del folclore latinoamericano que, según la tradición oral, es el alma en pena de una mujer que perdió o mató a sus hijos, y que luego, arrepentida y maldecida, los busca por las noches por ríos, pueblos y ciudades, asustando con su sobrecogedor llanto a quienes la ven u oyen. Su leyenda posee gran diversidad de versiones, con generalidades y particularismos propios de muchas regiones geográficas. A pesar de ello, su relato mágico y sobrenatural, emergido de múltiples orígenes, es constante y reconocible, con añadidos, texturizaciones e hibridaciones de muy diversos tipos.
La leyenda de la Llorona es antigua, tiene orígenes prehispánicos, en la forma de diversos personajes con características similares, presentes en las cosmogonías y creencias ancestrales de los pueblos autóctonos de América, transmitidos de forma oral de generación en generación, hallándose relatos comunes pero con diversas imágenes, emblemas y símbolos, lo que le da al mito una rica diversidad cultural. Durante la época colonial, las generalidades de la leyenda tomaron forma, y a través del tiempo, la leyenda de la Llorona se ha convertido en parte del imaginario colectivo de América Latina, volviéndose parte de la identidad cultural, trascendiendo fronteras y siendo parte del folclor y la imaginería popular de muchos países.
A lo largo de la historia, la figura doliente de la Llorona, su trágica y eterna condena de vagar a través de los siglos sin poder hallar a sus hijos, ha inspirado gran cantidad de manifestaciones culturales, literatura, canciones de la lírica popular, obras de teatro, bibliografía y artes audiovisuales de cine y televisión.                                                         

jueves, 22 de agosto de 2019

El Tue-Tue

Cuenta la leyenda que el Tue-Tue es una presencia maligna y muy temida en las zonas rurales de Chile. El miedo a esta criatura se debe a que ésta sería realmente un Calcu(mapuche que practica el mal con espíritus), o una bruja o brujo poderoso que conoce el secreto de los Calcu sobre al misterioso poder de volar transformados en el temido Chon-chón.
El Calcu o el brujo/bruja realizaría la transformación en Chon-chón untándose una mágica crema en la garganta.
Esta mágica crema haría que se le desprenda la cabeza del resto del cuerpo o que este ultimó, adquiriendo esta un plumaje, garras afiladas y grandes orejas que se transformarían en alas para poder volar; y si lo desea y es poderoso, incluso podría realizar una transformación completa para adquirir la forma de una especie de búho o lechuza. Así podría dejar el cuerpo en su casa y realizar fácilmente sus actividades malignas.
En el caso de los brujos o brujas, al momento de comenzar el vuelo además recitarían la siguiente frase Sin Dios ni Santa María, con lo cual el diablo les otorgaría más poder, para así lograr esta transformación; pero si por equivocación recitan otras palabras, sufriría una gran caída.
Al transformarse el Calcu dejando su cuerpo en su casa, debe siempre recordar que es necesario tener otro mágico ungüento para volver a su forma humana. Si se le perdiera, ocultara o destruyese su ungüento, el Chonchón volaría en picada hacia el suelo para matarse, ya que no soportaría el destino de quedar transformado para siempre en Chonchón; y en el suelo solo quedaría el cadáver de una lechuza o búho.
La transformación a Chonchón la realizarían siempre de noche, aunque su presencia sería delatada por su fatídico y temido grito de "tué, tué". El principal objetivo de la transformación en Chonchón sería para obtener agilidad para moverse. Mediante esta forma se dirigirían hacia las reuniones que realizarían estos tipos de calcu o brujos/brujas. Igualmente como Chonchón recorrerían los lugares donde desearía hacer daño o enfermedad, revoloteando alrededor de la casa, o en el peor de los casos entraría a la habitación del enfermo, donde lucharía con el espíritu del enfermo; para que este no pueda protegerse y así el Chonchón pueda tranquilamente chupar su sangre; lo que al poco tiempo podría ocasionar la muerte del enfermo si no se actuara rápidamente. Es por ello que cuando los campesinos escuchan el gritos persistentes de tué, tué, significa que el odiado Chonchón ha salido a anunciar que se puede producir una futura muerte de algún ser querido.